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Ayer tuve un día malo, esos que casi todos tenemos alguna vez, esos en los que te dedicas a estar en silencio sin decir nada, solo pensando y haciendo todo lo contrario de lo que Borges nos explicó en su escrito “Instantes” cuando ya veía la muerte de cerca, si viviera otra vez la vida ….…., pero que le vamos hacer, es inevitable tener esos momentos y preocuparse de las cosas que no nos gustan.
Al final saque la conclusión de lo que menos me gustaba ayer, es que soy un humano, vamos que pertenezco a un género que siendo “inteligentes” la usamos para lo que más valemos, hacer el mal para estar mejor.
La ambición nuestra es ilimitada sin más, y eso nos lleva siempre a no ser justos, lo que es interesante para mi es bueno también, lo que no, es malo y punto.
Gracias a esta gente idealista, que con todos sus defectos, que también los tienen, recordemos, son humanos, luchan por que algún día seamos todos un poco más iguales. “Pobres” el molde ya está hecho y por desgracia salió defectuoso, eso si mañana estoy seguro que volveré a pensar que es posible mejorarlo, porque si no soy capaz de eso es que estoy muerto del todo por dentro, y no debe ser asi por que yo noto que respiro aun.
